lunes, diciembre 23, 2013

DE MI PADRE (Y AHORA ME EXPLICO MUCHAS COSAS...)

El post de hoy no va de Londres, o quizá si… quizá estar aquí, sentirme tan sola, me hace pensar en las cosas realmente importantes y en las personas que quieres o has querido. Y es Navidad, fechas complicadas…

La semana pasada fue el aniversario de la muerte de mi padre. 16 años han pasado sin poder decir la palabra “Papá”… y es lo primero que eché de menos cuando se fue. Dentro de 5 años habré pasado más tiempo de mi vida sin él que con él… y a lo mejor son menos si tengo en cuenta esos primeros años de mi infancia de los que no me queda mucha conciencia ni recuerdos… Pensamiento triste. A veces me da miedo olvidar su cara… olvidarle a él al acostumbrarme a su no presencia...

Mi padre era un hombre muy generoso. Es la palabra que mejor le define, tanto en sus afectos como en sus recursos. Siempre lo daba todo por los demás aún a riesgo de quedarse él sin nada. 

Creció en el barrio madrileño de Lavapiés en la posguerra. Mis abuelos tenían una droguería en la Calle Argumosa, ahora es un banco. Era el pequeño de tres hermanos. Nunca estudió una carrera. Tuvo que hacerse cargo de la tienda para mantener a la familia y pagarle los estudios a sus hermanos mayores que ya habían empezado en la Universidad  (Ya he dicho que era generoso ¿no?) Jugó al fútbol en el barrio con Julito Iglesias, famoso en esa época por su prometedora carrera futbolística… pero se lesionó y  al final, se hizo cantante… “es de esas personas que sabias que tenía carisma, estrella y que triunfaría de una forma u otra…” eso me dijo mi padre. El fútbol le apasionaba, era muy fan del Real Madrid… y yo con él. Recuerdo los partidos juntos… al morir, dejé completamente de lado mi lado futbolero, perdió todo mi interés y no ha vuelto a recuperarlo... Ya no era, ni es, ni será nunca lo mismo.

Mi padre era muy católico, apostólico y romano. Mucho, mucho. Su fe era real e intentaba vivir según sus principios. Era muy buena persona, sin dobleces, sin maldad, transparente y siempre dispuesto a ayudar al prójimo sin recibir nada a cambio. Un ejemplo de cómo la religión bien llevada hasta puede ser positiva en algunos aspectos... Pertenecía a Acción Católica, una asociación que entre otras muchas cosas organizaba excursiones a la sierra de Madrid… y en una de estas excursiones… conoció a mi madre. Una mujer muy joven, delgadísima y guapa que se estaba lavando los pies en el lago de Peñalara... él se acercó y le dijo “que pies tan bonitos tienes” y a mi madre le hizo gracia… Yo no soy católica, no sé si quiera sí creo en algo… pero está claro que por lo menos al Catolicismo le debo mi nacimiento.

Toda mi infancia ha estado llena de visitas de sus amigos curas a cenar a casa. Uno de ellos era censor de la época franquista además de un gran amante y entendido en cine… a mi sus historias me fascinaban… como cuando me contó el lío que se formó con Mogambo, pero "que le iba hacer"… nos contaba, "es lo que le pedían…" y se reía.

Era muy creyente y de derechas.  En mi casa siempre se ha habló bien de Franco. Nunca se le cuestionó hasta que yo me hice mayor… Es cierto que mi padre siempre me contaba la misma historia sobre como los rojos habían cogido a mi abuelo a la salida de misa y lo habían subido en un camión rumbo a Paracuellos, pero que le salvo la vida por casualidad un vecino (rojo) del barrio que  reconoció al amable y buen droguero. A ver… casi le dejan sin padre, les tenía algo de manía sí.

Mi padre además… era un showman. Tenía un gran sentido del humor. Siempre estaba intentando hacerte reír… con bromas, chistes o motes… Mi hermana Ana decidió estudiar “Farmacia”, desde el día que le admitieron en la universidad pasó a ser “la aspirina”… haha! Tenía un humor a veces surrealista, muy en la línea de la Hora Chanante, iba a decir humor fácil… pero a veces no es ni tan fácil lograrlo. Era un cómico… cuando fue “a pedir la mano” de mi madre a mi abuela al pueblo, literalmente saco un cuchillo enorme cuando se la otorgaron, con el consiguiente grito de pánico de mi abuela y un tío de mi madre que también estaba… yo me lo imagino en plan “gracias por concederme la mano de su hija, se la corto y ya me voy…” Y puedo ver la mirada de mi madre fija en él con reproche… para luego reírse juntos. Mi madre tenía 19 años y se llevaban 10 de diferencia... (¡Además listo!)

Le encantaba la magia, el circo y los Hermanos Marx. Su ídolo: Groucho. En cuanto tenía la menor oportunidad se disfrazaba de él y le imitaba… le imitaba TAN bien!! Porqué además se parecían físicamente (hubo una época en la que mi padre llevo bigote igual que su ídolo, yo no lo recuerdo pero he visto fotos… ¡fabuloso parecido!) En cuanto a la magia… hacia trucos… por ejemplo se tragaba agujas e hilo y las sacaba enhebradas… dejó de hacerlo porque a mi madre se le encogía el alma cada vez que le veía tragar aquello… Se llevo el secreto a la tumba… Nunca nos contó el truco, NUNCA. Fue un gran admirador de Houdini… cuando él era pequeño era famoso y llenaba los periódicos, le marcó. Igual que le marcaron Los Intocables de Eliot Ness… que protagonizaron parte de la actualidad de su infancia. Quizá eso le hizo devorar novela y cine negro. Le encantaban las pelis de Humphrey Bogar y Hitchcock. Así crecí yo… entre Agatha Christie y Sherlock Holmes, el Halcón Maltes, ¡¡Más maderaaaaa!!, Chaplin y… Cantinflas.  ¡Ah! Y el oeste americano… me insistía en que leyera a Zane Grey… famoso novelista de oeste… y yo le hacía caso. Me leí un montón de libros.

Leía bastante y me animaba a mí a hacerlo. Le recuerdo quitándose las gafas para leer… y siempre con una especie de lupa alargada que usaba para aumentar las letras y facilitar la lectura… yo se la robaba para jugar… luego tenía que devolverla sin que se enterara, quizá sí se enteraba… pero no decía nada. Nunca se enfadaba. Mi madre era la que se enfadaba, por ella y por él… ¡jaja! Creo que sólo le recuerdo una vez muy disgustado, que me gritó… una noche que yo venía de jarana y le tuve esperando más dos horas en el coche para recogerme y llevarme a casa en El Escorial… También he de decir que yo era la niña pequeña de la casa… consentida y mimada por todos…  pero tampoco daba muchos dolores de cabeza a mis padres. Era responsable y obediente. Por lo menos de puertas para dentro… jeje.

He dicho que era un showman, porque de verdad lo era… le gustaba organizar cosas, dar sorpresas y hacer regalos… era el alma de las fiestas aunque mi madre le regañara diciéndole que le gustaba demasiado hacer el tonto… (Completamente hija de mi padre en este aspecto… a mi me llamaba “María Guerrero”) Una vez, me contó una anécdota de su juventud muy divertida… De soltero, estaba como siempre intentando hacer el bien y ayudar a los desamparados (¿he dicho ya que era muy buena persona?) daba clases como voluntario de escritura y lectura a los analfabetos por los pueblos y alrededores de Madrid. Iba con un amigo y se les estropeó el coche en el que viajaban… y por supuesto, no tenían ni un duro.  Se acercaron a una localidad cercana y para recaudar fondos se les ocurrió montar una función de teatro… Representaron el Don Juan Tenorio en versión absurda… Inés era el amigo de mi padre que tenía una barba negra como un hipster de ahora… mi padre: Don Juan. Cambiaron los versos para hacerla comedia. Todavía me acuerdo de algunas cosas: “oh Don Juan Don Juan yo te imploro, arráncame el corazón o anda, cómprame un loro…” “pues eso me extraña un montón, pues el DDT que uso es Orión” y todo rimas de este palo… Me decía que no sabía cómo no les habían echado a palos del pueblo…

Era un hombre que cuando prescribió un delito porque había ocultado cierto dinero a Hacienda… salimos a celebrarlo. “¡Ya no me pillan!” Decía… Creo que fue lo único ilegal que hizo en toda su vida.

Mi padre era inventor... patentó varias ideas... pero no fueron a ninguna parte. Una pena. Y también era súper despistado… pero mucho. Mi madre se desesperaba. Y todos en la familia sabemos que mi hermana Esther es la clara heredera de ese despiste. También conoció al Papa, no estaba previsto pero en la audiencia se saltó el protocolo... y protagonizó una foto que fue portada del periódico L'Osservatore Romano. La tenemos enmarcada por casa. Juan Pablo II le está poniendo una mano en la cabeza, mi padre está de rodillas. Podría seguir contando anécdotas y no terminar... Era todo un personaje...

El 17 de Diciembre de este año mi hermano firmo la venta de la tienda de mi padre. Una Administración de Loterías y Apuestas del Estado en Carabanchel. JUSTO el mismo día del aniversario de su muerte. Ironías y casualidades de la vida. Una tienda que levantó con mucho esfuerzo, por la que trabajo y lucho tanto. Toda su vida dedicado al trabajo para sacar adelante a su familia y el negocio. Se jubiló y casi no le dio tiempo a disfrutarlo… Por lo menos, creo que tuvo una vida feliz y plena. Y que todo el mundo que le conoció, le quiso. Imposible no hacerlo.

A veces pienso si levantara la cabeza que pensaría de mí… Sé que estaría orgulloso porque terminé la carrera (algo que él no pudo soñar para él mismo), que le haría mucha ilusión porque soy licenciada con un premio al mejor expediente académico de mi promoción… premio que él habría colgado en un puesto de honor… no como yo, que lo puse en el baño, encima del retrete. Pero en cuanto al resto… puff… no creo en su Dios, soy de ideología de izquierdas, viví en pecado con mi ex novio, sigo soltera, no tengo planes de formar una familia, fumo,apoyo el aborto, voy sin rumbo, sin un futuro muy claro... una egoísta que solo piensa en el presente y en ella misma… No, no… estaría francamente preocupado como lo está mi madre.

Me he cambiado su apellido por motivos prácticos… no creo que tampoco le hiciera mucha gracia... un apellido que se perderá sin remedio… y da penilla… En fin, por lo menos intento cada día ser buena persona como él y desde luego, ese desapego que tengo por lo material y la felicidad que me proporciona hacer feliz a los que me rodean… sólo he podido aprenderlo de una persona. Escribiendo este post, me he dado cuenta de lo muchísimo de él que hay en mí… de la cantidad de cosas positivas y buenas que me enseñó y que me han influido a lo largo de estos años.

En todo este tiempo no he dicho su nombre… para mí era Papá, no Fernando. Me costaba escribirlo. Me sonaba extraño. No familiar. Qué cosas… Fernando Uruñuela Ollero.

Mis últimas palabras con él no me hacen sentirme muy orgullosa, justo antes de irme a dormir… vinieron a ser… algo como…“¡qué pesado Papá! Déjame en paz…!” porque me preguntó que tal mi día en la Universidad… y me aconsejaría que estudiara y que durmiera bien... Al día siguiente ya no estaría para preguntarme. Nunca más.

¿Por qué he escrito este post? Creo que porqué con todo el legado que estamos dejando de nuestras vidas en Internet… mi padre se merece un espacio, un recuerdo. Quizá dentro de unos años alguien estudiando nuestra época y forma de vida, o simplemente algún curioso lo lea… y sabrá que mi padre existió, que fue un gran hombre y que hubo gente que le quiso muchísimo. Yo soy parte de su legado. Y aunque no es mucho, este es mi regalo para él… Un pedazo de inmortalidad en una página de Internet.



Feliz Navidad.

miércoles, diciembre 18, 2013

DE LA NIEBLA (MÁS EN MI CABEZA QUE EN LONDRES)

Hace tiempo que no escribo nada en este blog. ¿Por qué? Falta de tiempo supongo… sí, es un factor que duda cabe, pero una excusa también… realmente creo que es por embotamiento mental, crisis creativa y falta de ideas.

Cómo no sé de qué escribir he decidido escribir sobre eso… perdonad esta falta de originalidad. Hoy no creo que sea muy divertido.

El trabajo dignifica… yo lo gritaba en el 15-M… y también me recuerdo preguntándole a mi amiga Rebeca si podíamos decir esto aunque trabajásemos en Telecinco… El trabajo dignifica ¡una puta mierda! A mí me hace convertirme en un zoquete… sobre todo cuando en tu trabajo el uso de las neuronas es limitado. Desde que trabajo muchas horas me cuesta mucho más sentarme delante del ordenador y escribir o pensar algo decente, mínimamente ingenioso… Cuando tienes tiempo y tu mente vaga libre, sin horarios ni responsabilidades la capacidad creativa se multiplica. Te das cuenta rápido. Puede que estés tres días sin hacer nada, poco o una basura… pero de repente te viene la inspiración y lo clavas. ¿Qué pasa? Que has necesitados esos tres días para llegar a ello… Cuando trabajas, te cuesta el doble de esfuerzo. Soy de la teoría de que la inspiración siempre llega trabajando pero también es verdad que las responsabilidades pesan sobre todo a nivel mental.

Por otro lado, no es que me hayan dejado de pasar cosas… en una ciudad como Londres SIEMPRE te están pasando cosas… lo que ocurre es que ahora me parecen NORMALES y CORRIENTES. Me preocupa que llevar tiempo aquí me ha haya hecho tender a normalizar situaciones que recién llegado se viven diferente. Sólo espero no haber perdido esa capacidad de sorpresa y desconcierto que me ha llevado a amar tanto esta ciudad.

Todo esto me asusta un poco. Estoy en época de barbecho…y no me gusta.  Quizá el colapso de los meses pasados trabajando en 15 historias a la vez a destajo me ha dejado agotada intelectualmente. Estoy cansada de estar cansada. No me apetece socializar mucho, ni si quiera me disfracé en Halloween… y si me conocéis, sabéis que esto es MUY grave. Me obligo a quedar y hacer cosas porque sé, que así no soy yo… Esto es: MUY RARO.

He tenido que trabajar el doble o el triple de lo normal por el vil metal. Hay que pagar la renta y he elegido para vivir una ciudad “muy barata”… Cobro por horas, así que si me voy de vacaciones no recibo dinero. En enero voy a España dos semanas lo que me ha llevado a tener que trabajar sin ver la luz del sol,  bien es cierto que aquí no es que se vea mucha… pero aún así… No mola.

A veces estoy trabajando 18 seguidas en el Hotel que me dejan completamente exhausta… exhausta físicamente. Me desmotiva todo. Me siento alienada y poco útil. Un trabajo fácil que solo demanda de mí ser un poco nazi: seguir las reglas, hacer lo que me piden y no pensar… pero es que… yo no estoy a acostumbrada a eso. Aunque pueda sorprender… YO PIENSO MUCHO.

Lo que me llega desde España tampoco ayuda… España solo me da malas noticas a todos los niveles. Familia o amigos queridos que sufren… Y sufro yo también, sufro de impotencia, porque además estás lejos y no puedes hacer realmente nada. Ni siquiera besarles, abrazarles o cogerles de la mano… gestos sencillos que sólo aprecias cuando no los tienes o no puedes ofrecerlos.

Espero que esta crisis cese más pronto que tarde… Entiendo que hay trabajar, eso es así… pero yo no he venido aquí a eso, o por lo menos no a dejarme la espalda en algo que no me aporta nada, solo dinero. Así que para el próximo año tendré que mover el culo en busca de nuevos horizontes laborales y creativos. Sé que este año he conseguido bastante… he hecho muchas cosas bonitas y apasionantes en producción o como guionista y reportera. Pero ahora mismo me cuesta ver claro cualquier avance…

Solo quiero que estas nubes pasen, y que pasen YA. Porque no puedo con esa sensación de estancamiento vital. Necesito alguna buena noticia, nuevas ilusiones, algo diferente y emocionante en mí vida. También os digo, no voy a esperar sentada a que ocurra… Por muy deprimida que ahora me sienta (y no pueda parar de escuchar Radiohead como remate)  a mí la niebla que a veces inunda Londres no va a pararme. It´s about time.


PD. este post ha sido un ejercicio totalmente terapéutico y reflexivo... haha! por lo menos me ha hecho publicar algo y reactivar el blog que tenia abandonado. Paso 1 del levantamiento: retomar "Bea & The City"


jueves, agosto 29, 2013

DE LAS CONVERSACIONES CON ANGELINES (LA MADRE QUE ME PARIÓ)

Mi madre me tuvo con 40 años. Fui un resbalón. Ella ya tenía tres hijos bien creciditos y de repente aparecí yo en sus vidas. No diré su edad, porque tampoco la sé con exactitud, pero tiene más de setenta y tantos… Cuando decidí cambiar de vida y venirme a Londres ella no lo entendió. En general, nos entendemos poco. El salto generacional es muy grande, lo tengo asumido y vivo con ello. Pero hay algo mucho más fuerte que nos une, el amor que sentimos mutuamente. Recuerdo ir muy enferma en un viaje de autobús nocturno por en medio de Perú y solo llamarla, sólo quería a mi madre... entre la fiebre y los dolores... la llamaba... menos mal que estaba mi amiga Silvita que me consolaba. Pero hay momentos en los que sólo una madre puede entendernos.

Mi madre es una mujer muy fuerte. Ella lo es de carácter y también se ha ido haciendo por los golpes de la vida. Perdió a su padre con 7 años y perdió a su marido de una forma inesperada, de un día para otro. Como consecuencia de la muerte de mi padre, lógicamente nos unimos más y se apoyó mucho en mí. La hija pequeña de 19 años que estaba todavía por casa.

Pocas veces la he visto llorar, la última casi sucede cuando me fue a recoger al aeropuerto… que nos emocionamos. Su única obsesión es que vuelva a España y esté con ella, algo que a corto plazo no sucederá. Ella lo sabe pero se engaña a sí misma negando lo evidente. A mí me da mucha pena que sufra por mí, pero que le voy hacer… al fin y al cabo es mi vida, y en Londres soy feliz.

Si algo distingue a mi madre es su integridad, sinceridad y su sentido de la realidad. Tiene la capacidad de hacerte poner los pies en el suelo de un plumazo. Algo que para alguien que vive en las nubes como yo, tampoco viene mal de vez en cuando. Nuestras conversaciones son bastantes divertidas. Tiene frases míticas y consejos para mi, que la mayor parte de las veces me hacen reír… como su gran momento de: “hija nunca te fíes de un hombre con mochila… o es hippie o es vasco”.

Me dio por colgar extractos de nuestras conversaciones en mi perfil de Facebook y ahora mi madre tiene un auténtico club de fans entre mis amigos. Como esta, enseñándole en Google Maps mi casa en Londres. 

-Mamá en esta calle (también jaja) vivió Edgar Allan Poe y Daniel Dafoe...
- ¿Quién?
- Unos escritores... y se llama Church St. porque hay una iglesia ¿la ves?
- Mira bien cerca la tienes... ¿Es Católica o Protestante?
- Mmmm pues no lo sé
- ¿Es qué nuca has ido a la iglesia?!!
- Eeeeh... NO. Entré una vez para ver cómo era...
- ¡Tú estás tonta muchacha! ¡¡Con lo qué podrías ayudarte!!

Un milagro querría que ocurriera… Otra vez hablando sobre mis amigos:

-¡Ay que ver mamá! Como pasa el tiempo y mis amigos se van estabilizando… no hago más que ir a bodas, bautizos, pronto comuniones…
.-¡Pues veras cuando empieces a enterrarlos!

O aquella ocasión en que me dijo “¿vas a salir así? vas un poco zorrón ¿no?”  a lo que sólo pude contestarle: “entonces es que voy bien vestida…” con su consiguiente cara de espanto y me fui. Un día le enseñé una foto disfrazada en Halloween de niña muerta y ella me dijo: “¡estas igualita que yo el día de mi comunión!”… Pues sí, tengo unas cuantas situaciones memorables…

Mi madre confunde las palabras… algo que yo he heredado me temo… cambio los nombres de las cosas y ella también. Un día pase mucha risa en el médico, la acompañé porque tenía mucha congestión y le empezó a pedir “anticonceptivos”. El médico se quedó blanco viendo a mi madre, que se conserva bien… pero vamos, aspecto de edad de concebir no, no tiene… ella quería “antihistamínicos” se lo tuve que explicar al señor doctor que solo dijo un muy educado “ya me extrañaba…” Y como estas, también tengo otras cuantas.

Antes de venirme la enseñé a utilizar Skype para poder comunicarnos con regularidad.  Las primeras semanas nuestras conexiones fueron muy surrealistas… al principio no sabía conectar la cámara y solo la escuchaba… (Estamos hablando de una mujer mayor que no ha usado un ordenador en su vida), me he pasado horas hablando con una `pared porque no había forma de que colocará bien la cámara… otras veces solo la veía y no la escuchaba… así que solo hablaba yo haciendo monólogos contándole como me iba… a ella la veía reírse o hacer gestos. Me acuerdo que una vez le dije que me había comprado ropa en una charity porque es super barata y muy chula. Se puso a hacer gestos y parecía alterada… Al rato mi hermana me explicó por “whaps” que nuestra madre le había dicho que por favor me dijera que no me comprara más trapos y sobre todo, que a su casa no los llevara… razón no le falta que le tengo dos casas invadidas con maletas.

Con el tiempo fue aprendiendo a manejarse con el Skype… se apunto a un “centro de viejos” (como ella lo llama) a clases de informática e internet para poder entender algo… Ahora hasta me enseña a mi gato para que le vea, me muestra cartas o facturas que llegan a mi nombre…, esto último tiene que depurarlo un poco porque no se aclara con la cámara y normalmente no veo nada… aunque yo le digo que sí… y que si puede leérmelas para que lo entienda mejor…

Nunca jamás ha mostrado el menor interés por mis cosas… más allá de que encuentre un buen hombre, un trabajo estable, me case y tenga una familia… cosas que para ella son un básico y algo que para mí, es completamente prescindible.

Nunca ha querido leerse nada de lo escribo ni me pregunta en que ando metida… dice que eso son tonterías y que más me valdría quitarme los pájaros de la cabeza… ¡con lo bien que estaba yo en Telecinco! Aún así, la última vez que estuve en Madrid mi hermana me pidió una de mis obras de teatro para leérsela, mi madre la vio y empezó a leerla para mi sorpresa. ¿Qué dijo? Pues una crítica como no podía ser menos: “hija no entiendo porque hablan diciendo tantas palabrotas! ¡Vaya lenguaje! ¿No podían decir las cosas de otra forma? ¿Es que tú hablas así…?” lalalaaaaaaa… Le expliqué que si los personajes están enfadados tiene que demostrarlo… pero no le convencí mucho. No me dijo si le gustó, supongo que no…

La semana pasada fue su cumpleaños. Toda mi familia (menos yo) se reunió en su pueblo de Salamanca para celebrarlo. Me mandaron fotos… bueno, mi cuñado me mando fotos de toda la familia comiendo  pero sin ella… cosa que tampoco me extrañó porque como buena madre Made in Spain estaría en la cocina pendiente de que todo estuviera en su punto de cocción perfecto… AY, les eché de menos… y a la comida de mami también!  Jaja!

Hace más de un mes que no hablo con ella, y echo de menos nuestras conversaciones absurdas…Está incomunicada en el pueblo sin cobertura, sin Internet… sin nada. Y súper feliz claro, rodeada de sus seres queridos… y sin mí. La hija díscola que va a su rollo, con la que no tiene nada en común y a la cual no entiende en absoluto pero a la que aún así quiere. No le queda más remedio, soy su hija y ella, es mi madre. Y madre solo hay una.

miércoles, julio 03, 2013

DE LAS COSAS QUE ME PASAN - VOL.3 (Y SIGO JURANDO CON LA MANO EN EL CORAZÓN QUE SON VERDAD)

Vamos a por la tercera entrega de “cosas que me pasan” en esta ciudad tan loca que es Londres. Ya tocaba…









-       Volviendo a casa una noche después del trabajo me he encontrado a una china por la calle. No vendía nada. Era una china perdida y sin papa de inglés que me enseñaba una dirección. La pobre estaba bastante desorientada y bastante lejos de su destino. Le expliqué como llegar y sólo me sonreía… Tuve que dibujarle un mapa y señalarle el camino porque no había forma de entendernos, yo sí que debía hablar chino para ella… Después de dejar  a la mujer medio encauzada justo en la puerta de mi casa me encuentro un zorro.  Nunca había tenido a uno tan cerca (el animal propiamente dicho digo…)  Me encantan los zorros. Llevaba un bocata de CHORIZO en el bolso y le empecé a lanzar rodajitas a ver si conseguía que se acercara más… y el chorizo le encantó… claro, ¡¡era español!! Y los zorros sor famosos por su inteligencia. Mientras le lanzaba el chorizo le decía cosas como “zorrito bonito, cosa guapa, te gusta el choricito, que rico eh? Es chorizo español…” y mierdas así con esa voz típica tan estúpida que te sale cuanto te diriges a niños pequeños o bebés… Ahora el zorro se ha hecho mi amiguito y me acompaña a casa todas las noches, pero ya no he vuelto a llevar un bocata de chorizo en el bolso.  

-       He ido con mi amiga Marta a un pub a  intentar ligar y no sé cómo,  hemos acabado pasando la noche sentadas y rodeadas de travelos… Así NOOOO. Hay algo que hacemos mal… no sabemos qué.

-       Me han invitado a una exhibición… prometía todo, champan gratis y se celebraba en un “Gentleman Club”,  ilusa de mí me emocioné pensando que habría muchos hombres… y efectivamente los había, pero también putas. Sí, era un dancing pole de esos con tías buenísimas en bolas por todas partes cobrando por sus servicios. Pues así… ¡¡¡TAMPOCO!!!! Encima arrastré a mi amiga Gloria que estaba de vista por Londres vendiéndole la moto de una exhibición super cool y la llevé  a un prostíbulo… ahora, bebimos champan gratis hasta perder el conocimiento… y NO nos confundieron con prostitutas… lo cual no sé si es bueno o malo… 

-       Han venido a arreglarme la caldera y el señor técnico antes de marcharse me ha regalado dos cajas de cookies y una botella de una especie de mosto. ¿Por qué? Pues no sé, le caí bien… SÓLO ME ARREGLÓ LA CALDERA, lo juro. Aquí la gente regala cosas… a mi amiga Vanessa, precisamente el día que la conocí, un hombre por la calle le regaló un pan… no hay que darle más explicaciones. 

-       Siempre que entro en UK lo hago con el pasaporte digital automáticamente por unas puertas especiales para evitar, aparte de la cola, que me pregunten “cosas” los de emigración. A mí vuelta de mi convalecencia en MadriZ, cambié de aeropuerto, fui a Stansted que por lo visto está más cerca de mi casa. Pues salía por la puerta final tan contenta con mi regreso y mis enormes maletas, cuando una chica me para… y me empieza a preguntar “cosas”…  ¿De dónde vienes? De España, ¿de qué ciudad? Madrid ¿vives en Londres? ¡Sí!, ¿trabajas aquí? Si (aquí empiezo a mentir…) ¿en dónde? (ups!) en un restaurante… ¿Cuál? (Ups! Ups!) en uno… empezaré ahora, es que no sé el nombre… ¿pero no vivías aquí? bueno es que vivo entre Madrid Londres… trabajo haciendo películas, soy guionista, entonces cuando me sale trabajo en España me voy y luego me vuelvo cuando acabo… (película la que me monté yo). La bola fue creciendo… pero vamos ¿qué necesidad tengo de mentir? ¡¡Y más a emigración…!! A mí un día no me dan a dejar pasar joder… se me va la olla… Al final la chica terminó pensando que yo era alguien importante en España… ¡jajaja! 

-       En UN día de sol, el único vaya… con 25 grados lo cual aquí es como 35… he tenido tanto calor que tomando el sol en el parque decidí quitarme el vestido y quedarme en sujetador y bragas. El parque estaba medio desierto ¿vale? Sin un alma… Así que estaba la mar de contenta y feliz… hasta que aparece UN EQUIPO de beisbol de adolescentes. (Hola ¿qué tal?) El equipo completo y justo pasan a mi lado… por lo menos el conjunto de lencería era mono y sin mucha transparencia… pues eso, como siempre Murphy haciendo de las suyas…

-       Cuando fui al hotel a firmar mi contrato, tuve que rellenar un montón de papeles… en uno de ellos estaba la típica pregunta de cuál era mi género… yo respondí: HUMANO. La de recursos humanos se moría de risa, me dijo que en años era la primera vez que lo veía… y que parecía un chiste de “Stand Comedy”… ¡¡vaya!! yo sólo pedía perdón y me tapaba la cara… tengo poca vergüenza, pero algo debe de quedarme porque me puse roja como un tomate… A la mujer de recursos humanos le he caído "en gracia" y no hace más que darme trabajo y doblarme turnos… 

-       He ido a pedir trabajo a Zara… Al rellenar la solicitud me pedían dos trabajos y dos personas de contacto de los mismos para pedir referencias. No sólo me he inventado los trabajos, si no que he puesto MÍ NÚMERO de teléfono español, en uno mi móvil y en el otro el teléfono fijo de mi madre… pero con otros nombres… si piden referencias, nadie mejor que yo para darlas… (o mi madre) No me han llamado lógicamente, ni para trabajar ni para confirmar los trabajos… ayayay…

-       He tenido que esconder una botella de vodka debajo de una mesa durante una cena. Me explico: se celebraba un concierto de música árabe en el hotel… la entrada más barata 400 libras y la más cara 800… sólo con eso podéis imaginar el tipo de clientes que tengo por allí… Bueno, todos árabes venidos de Dubai, Arabia Saudí, etc… ¿qué pasa? Que son musulmanes… ¡Oh! El alcohol está prohibido… y más beberlo delante de otros… así que escondíamos vino en las cafeteras (al ser tazas de cerámica no se veía) y también me tocó esconder una botella de vodka debajo de la mesa… Y mientras, uno de los musulmanes díscolos me hacía fotos descojonado de la risa… muy fuerte… Lo mezclaban con zumo de naranja que les poníamos en jarras… ¡pedazo destornilladores se metían! Estaré inmortalizada en las fotos de recuerdo de ese concierto de algún jeque… La asistente de la mesa que nos ayudó a emborracharnos… Pero bueno, con tan buen fin, no me importa… Vaya panda de reprimidos los musulmanes… en fin… ese es otro tema…
 
Y hasta aquí por hoy… iré recabando más anécdotas absurdas de esta vida mía por estos lares tan surrealistas.

jueves, junio 20, 2013

DE MI PLAN MILLONARIO (Y LOS SUEÑOS, SUEÑOS SON)

Hay gente que sueña con que le toque la Lotería, yo sueño con casarme con un millonario. Está visto que no me voy hacer rica por méritos propios… una vez asumido, necesito encontrar a un hombre que esté podrido de dinero para ayudarle a gestionar todos esos billetitos que le sobran con un buen fin: yo.

Lo llamo “El Plan Millonario”

Mi primer novio tenía mucho dinero… Su padre tenía un Porsche (que le había comprado al Príncipe)  y su madre un M3 para hacer la compra…Teníamos veinte años, me regaló un anillo de compromiso, nos queríamos mucho y él me dejó por otra… A partir de ahí tengo una larga lista de muertos de hambre…músicos, bohemios de almas torturadas, intelectuales, fotógrafos… ¡artistas! pues eso, sin un puto duro. Y así… ¡¡¡vamos MAL!!! (Son mi perdición pero si consigo un marido de fortuna siempre podría tenerlos de amantes…jaja)

El año pasado estuve cerca… conocí a un millonario (perdón multimillonario como él mismo me corrigió una vez) pero era muy joven… 26 años… además tendría que haber esperado a que heredará toda la fortuna familiar de su padre. Estaba bueno, era divertido y listo… nos entendíamos a todos los niveles… no me hubiera importado esperar… pero se volvió a su país el muy bobo.

En Londres hay gente con mucho dinero, pero mucho… ahora, hay que saber dónde encontrarlos.  Por eso, a la hora de plantearme el trabajar de cualquier cosa para sobrevivir aquí… (Escribir, mis movidas varias y tal… está muy bien pero no me dan para pagar el alquiler) pensé… si tengo que ser camarera, he de serlo con glamur y tener acceso a clientes con dinero. Así que, he conseguido un trabajo en el mejor Hotel de 5 estrellas de esta ciudad.

Trabajo en eventos y todas las noches estoy rodeada de la “crème de la crème” de la alta sociedad internacional. De momento ni me ven… pero bueno, acabo de empezar… dadme un tiempo. Los del Hotel lógicamente no saben nada de mis intenciones, pero tampoco saben que tiene contratado a alguien con excelencia académica y casi un doctorado (por lo menos escrito, no presentado porque se me olvidó pagar una tasa y luego ya me dio pereza…) pero sí, soy más lista de lo que ellos creen… (aunque lo de NO presentar la tesis lo contradiga haha)

Es importante diferenciar entre un hombre rico y un multimillonario. El hombre rico NO se casará contigo… no, no… te hará regalos caros y tendremos que compartir su dinero con otras… no interesa… tenemos que focalizar, encontrar al incauto millonario que nos financie de por vida con un contrato de por medio y atención: al que podamos ser infieles… siempre con discreción está claro... pero si es de tendencia a mirar a otro lado sería perfecto. 

En fin, para conseguirlo creo que siempre hay que estar presentable y tener educación… (creo que esto lo cumplo), aparte hay que  tener cierta cultura… soy experta en saber poco de mucho… por eso siempre tengo tema de conversación… pero también sé cuando callar y hacerme la tonta para que los hombres se crean más listos (éste punto es importante) y otra cosa no, pero conmigo aburrirse no es una opción.

Se puede intentar seguir las tácticas de la peli de Marilyn, pero a ellas no les sale muy bien, deciden que el amor es más importante... valiente tonteria... Así, no se va ninguna parte!! hay que tener el objetivo claro.

Sinceramente, creo que actitudes para ser una buena consorte de un señor con pasta me sobran. Siempre he pensado que sería una scort perfecta que también soy muy complaciente y obediente. 

A mí me da igual que sea guapo o feo… sólo me importa la cantidad de efectivo que maneje. Hombre, si está de buen ver ¡¡mejor que mejor!!! ¡Qué duda cabe! pero no me hago ilusiones. Encontrar un tipo como Grey (millonario, guapo y pervertido) pues sólo pasa en novelas de difícil comprensión… comprensión no por la trama, bastante simple, si no comprensión de éxito y de sintaxis…

No digo que vaya a ser fácil… pero una vez esté enganchado… sólo habrá que empezar a quejarse: “tu fortuna es más importante que yo…” “soy como un florero… bli bli bla…” que se sienta culpable y entonces empiece a soltar el dinero para que te calles y le dejes en paz… Tengo que conseguir cantidades obscenas de dinero… le puedo vender que necesito un proyecto propio al que dedicarme en cuerpo y alma y no sentirme sola… (Porque el tema tener hijos no lo contemplo, pero si al principio hay que mentir, se miente) Aquí es donde se la cuelo… necesito una Fundación o una charity… que eso a los millonarios les encanta y seguro les desgrava.
Es un poco triste que para ser “mujer de éxito” y poder hacer realidad tu aspiración vital se tenga que recurrir a pensar en cazar a un millonario, lo sé… pero el mundo está mal hecho. No es mi culpa.

Algunos os preguntaréis… ¿para qué querrá  esta mujer tanto dinero? Realmente no es para mí. Quiero crear una fundación con mi nombre para ayudar a artistas con talento a nivel internacional. Sería una mecenas ilustrada dando oportunidades y llevando cultura de calidad por todo el mundo.

Poey: Wasted Talent Foundation  PWTF (Pero… What The Fuck!!)

Lo tengo todo pensado, aglutinará todas las artes… Galería, editorial, teatro y productora. Y podré dar trabajo a todos mis amigos, y no sólo porque sean mis amigos, si no porque son valiosísimos, brillantes, llenos de talento… y deberían poder demostrarlo: Tendré a Mikel y a Raúl de gestores culturales,  Vane llevaría todo el tema gráfico, Sofía supervisión de escenografías y estructuras (esa asignatura que sufrimos todos), Helena y Nico diseñando las sedes, María defendiendo los derechos de mis trabajadores (sí, sí, como lo he escrito), Inma llevará todo el tema de merchandising, Rodrigo el gabinete de prensa y comunicación, Erick relaciones públicas, eventos y mi estilista personal, Gon mi PA, Carolina de intérprete, Marta Reig llevará la web, Elisa jefa del departamento audiovisual, Fer el centro dramático, Esteban supervisor de danza…, Marta y Christelle pueden ser lo que ellas quieran mientras estén cerca… y así… Además tengo una larga lista de futuras promesas a las que apoyar económicamente en su labor creativa (Juan Soto Ivars incluido). ESTÁ TODO PENSADO. Falta… lo que falta: DINERO. Como siempre.
Sé que la riqueza no da la felicidad, lo sé porque lo vivo día a día en mis carnes… nunca he sido más pobre y he sido más feliz… pero… ¡Ay! ¡¡¡Sería tan bonito!!!  Ya lo dijo Spielberg: “Mi profesión es soñar” Y yo soy una “professional dreamer” I know… para lo poco que duermo, sueño demasiado.   ¡Ah! Pero sin estos pensamientos de vez en cuando la vida sería tan aburrida… Ya tenemos la cruda realidad constante que nos frena, al menos soñando somos libres. Y  a veces, los deseos deberían tener la obligación de cumplirse… aunque fuera sólo una vez en la vida… con millonario o sin millonario de por medio.

¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.

Del amigo Calderón de la Barca. Always in my mind.


NOTA: El nombre de la Fundación no es definitivo… sigo trabajando en ello.

lunes, junio 17, 2013

DEL TIEMPO EN LONDRES (Y EL TIEMPO DE LONDRES)

 
Desde que llegué a esta ciudad me ha parecido especialmente curioso cómo pasa el tiempo… se supone que el tiempo es igual en todas partes… una hora son 60 minutos en cualquier parte del mundo… ¡¡pues no!! yo defiendo que en Londres, lleva su propio ritmo. Mucho más veloz y frenético. No en balde lo más distintivo de la ciudad en un reloj: el Big Ben, que lleva otro compás, y siendo como es el carácter inglés, tiene que llevar la contraria al resto. El Big Ben nos vigila... marca el ritmo vital y acelerado de esta singular ciudad.

Aquí un año…¡¡parecen 5!! Y las semanas ¡¡meses!! No es porque se me haya hecho largo... no, no… es por la intensidad con la que se vive. Me parece mentira que sólo lleve año y medio y haya hecho tantísimas cosas. Mi conocimiento de Londres es asombroso, no pleno, porque está ciudad es infinita… es imposible dominarla por completo, ella misma se reinventa constantemente para no darte tregua… nunca llegaras a conocerla completamente. Y por eso, nunca puedes cansarte. Londres es una sorpresa constante, un misterio a desvelar en cada calle, en cada edificio, en cada mirada…

A mi normalmente me faltan horas en mis días… deberían existir días más largos sobre todo en esta ciudad… Aunque es curioso, porque en primavera y verano tenemos más horas de luz que en España… Anochece  sobre las 21.30 pero, atención: amanece a las 4.15 de la mañana… ¡¡es muy fuerte!! A mí esto me resulta bastante molesto… ¡¡No hay forma de volver a mi casa y que no sea de día coño!!  Si ya es una mierda cuando estas por ahí de juerga, a las 6 y pico sale el sol y te sientes como un vampiro… a las 4.30 todavía puede quedarte media noche por delante… O como me pasó hace unos días, volvía de sesión de pelis en casa de una amiga, llegué a las 4 y estaba amaneciendo… ¡por Dios! Que no venía de ninguna party y me sentí como una crápula…
Una vez leí que en Londres todo cambia cada 5 minutos desde las personas hasta el tiempo (meteorológico) Es una ciudad normalmente de paso, yo sé que no voy a quedarme aquí para siempre. Como casi todo el mundo que viene soy consciente de su temporalidad. Si te fijas bien, cuando vengas a Londres te darás cuenta de que no hay personas mayores… apenas las verás… es imposible soportar este ritmo con determinada edad. Simplemente, no se puede.

Si no le pillas el tempo… corres el riesgo de desafinar. La orquesta se desplomará… el mundo se te vendrá encima… y estarás perdido… porque además, el clima no ayuda a la positividad vital. El clima… me rio cuando leo en Facebook los comentarios de mis amigos de Madrid quejándose del frío… ejem… A mí me afecta lo justo…
Una noche en una parada de autobús un chico francés se me puso hablar y me preguntó cómo no prefería estar en España disfrutando del buen tiempo… yo le dije, que llevaba 33 años con sol, no me importa estar unos poco sin él. Es verdad que el año pasado estuvo tres meses sin parar de llover y a mi casi me da un infartito… sobre todo cuando no estás acostumbrado, pero es un precio que hay que pagar si realmente quieres vivir aquí.
Si estás deprimido, las cosas no van bien, estas disgustado… y encima no para de llover o hace frío… aquí te hundes… ¡¡pero te HUNDES!! He tenido unos descensos a los infiernos que gracias a Dios me llamo Beatriz y he podido sacarme a mi misma de ellos… Eso sí, cuando sale el sol, no existe mejor ciudad en el mundo. Pero de todo se puede sacar un aprendizaje, en cuanto aparece el Señor Lorenzo te lanzas a la calle y lo aprovechas como nunca en tú vida… lo típico, cuando no lo tienes lo aprecias el doble.
En Inglaterra se habla constantemente del tiempo. Porque preocupa y mucho.  No he tenido una sola conversación en esta ciudad en la que en algún momento alguien haya hecho aunque sea, una breve alusión al clima… No sales de casa sin consultar la BBC weather… es casi obsesivo. Cuando voy a España disfruto de esa sensación de libertad que es salir a la calle y despreocuparte completamente del maldito  “tiempo”. Aparte suelo pasar calor, tengo el termostato de mi cuerpo averiado, es pisar territorio español y empezar a sudar… lo paso mal porque siempre he sido bastante “caliente” (haha) temperatura corporal elevada (queda mejor) Tengo fotos en Perú con manga corta y el resto de mis amigos con bufandas y abrigos… por lo visto es porque soy de ciclo corto… pero bueno, esto es otra historia… jaja!

Hay que tener claro que aquí el “verano” NO EXISTE. Esto es así. Tendrás 5 días estupendos que lo mismo con suerte llegan a los 25 grados… Y puedes tener: nubes, lluvia, sol, lluvia, sol, nubes, nubes, sol, lluvia en un lapso de 40 minutos. Momento look “cebolla” a la orden del día… También es verdad que por Londres poco les importa… con nieve he visto a chicas con sandalias… Es algo así como: me quiero poner esto y me la pela el tiempo… nada me lo va a impedir!!  si no pensaras así, probablemente nunca te podrías calzar unas sandalias en todo el año.  
Pero el tiempo siempre pasa… y se acaba. Tiempo veloz, tiempo implacable, tiempo cambiante, mal tiempo, a veces buen tiempo… tiempos mejores, tiempos peores, tiempos modernos… tic tac tic tac… sigue corriendo… tiempo, tiempo… lo único que pido es saber burlarle, aprovecharlo siempre y conseguir que siga jugando a mi favor con sol, lluvia o nieve.

domingo, junio 02, 2013

DEL DÍA QUE BERTÍN OSBORNE LIGO CONMIGO (Y CUANTAS HABRÁ COMO YO...)

Hay veces que almacenas cosas en archivos perdidos de los cajones de tú memoria y que sólo a veces ante determinados estímulos vuelven a ver la luz. Recuerdas anécdotas y datos que tenías completamente olvidados cogiendo polvo. Bien, esta semana vino a mi memoria este momento curioso de mi vida.

Cuando era joven (más joven) iba de público a programas y series de televisión y todo tiene una explicación.
Después de querer ser con 6 años médico o veterinario (algo que ayudara a las personas…), detective privado (Culpa de Sir Arthur Conan Doyle) o torera (mi familia se iba de paseo y yo me quedaba viendo los toros subida encima de una mesa imitando los pases de rigor… todavía no entiendo el porqué… nadie a mi alrededor tenía afición alguna al mundo taurino. Encima, cuando de mayor los he criticado mi madre siempre ha tenido esta carta para echármela a la cara…)  Resulta, que a los 7 años cambié de opinión y ya nunca hubo vuelta atrás… desde esa edad, lo tuve claro, quería ser: ¡¡Directora de cine!!. Sería la directora que adaptara y llevara al cine El señor de los anillos o la Dragonlance  (aqui nos reimos todos lalalalaaaa) Sabía que tenía estudiar Comunicación Audiovisual… Así que, para mí, ir a programas y series de TV era una oportunidad de observar, investigar que se cocía y ganar algo de dinero.

Encontré una agencia y con Sara Ramos (amiga desde el colegio y actual flamante presentadora del territorial de Madrid en TVE1) fuimos mil veces a distintos programas. Tengo grabada una escena: las dos esperando para ir de extras a “Farmacia de Guardia” esperando en unos sillones en la entrada de Antena 3 a qué alguien nos recogiera… yo le dije “¿Te imaginas que dentro de unos años seamos nostras las que pasemos por esa puerta para ir a trabajar?” La última vez que la vi se lo comenté, ella no se acordaba… pero yo no puedo olvidarlo… está grabado a fuego… pasé 6 años de mi vida cruzando por ese control de seguridad y detector de metales para ir a trabajar cada día... Cuidado con lo que deseáis…
Total, que fui de público a “Lluvia de Estrellas”. Ese día no vino Sara, fui con mi amiga Carolina. Nos pusieron en primera fila y tan contentas aplaudiendo cuando nos lo mandaban. En un corte, el presentador, que como todos sabéis era Bertín Osborne… se acerca, si si, se acerca a mí con un esmoquín inpecable y esa planta... Empieza a despegar todo su “charming” de seductor nato… todo sonriente, estupendísimo, simpatiquísimo… Guapo, porque Bertín es un hombre guapo… y yo pensé: “cuando le cuente a mi madre que he hablado con Bertín…” porque mi madre, como toda madre de esa época, adoraba y adora a Bertín Osborne.

El tema es… ¡¡¡qué yo tenía 17 años!!! (¿Hola, qué tal?) Estaba estudiando COU de letras mixtas  (por si alguien recuerda que eso existió alguna vez… no sé la equivalencia ahora mismo, no me aclaro con la educación española)  Tonto no es… Yo era mona y sobre todo muy muy pánfila… Bertín me decía cosas como “qué guapa eres” “¿Te lo estas pasando bien?” y yo reía y contestaba… Él vuelve a escena y mi amiga me empieza a poner la cabeza como un bombo con cosas como: “¡qué majo! ¡Has ligado! ¡¡Dios mío Bertín Osborne te ha dicho guapa!!” Y cosas de ese palo que a mí me pusieron súper nerviosa porque yo era una adolescente medio tonta. A mí me parecía MUY MAYOR… está claro que él dentro de mi vio una estrella y quería que brillara... ayayay...
Siguiente corte, Bertín vuelve al ataque… Dios mío, es que apenas recuerdo lo que me decía pero era un tipo sumamente ingenioso y gracioso…nos hablaba de los concursantes haciendo chistes… a mí un hombre divertido  y tan caradura me pierde. Seducción a tope… En cada corte venía de visita… de “corte-jo”… jaja! Cinco horas de grabación y Bertín se portó como un auténtico galán de telenovela… educado, respetuoso, zalamero… probablemente  no quería nada, se estaba divirtiendo o simplemente es que él es así por naturaleza… no lo sé… Sí que preguntó que hacíamos después…Y vuelvo a decir: yo era boba, inexperta en hombres y estaba en la parra. Tampoco existían los teléfonos móviles si no ahora tendría una silla en Sálvame Deluxe que me habría gestionado yo misma… Nunca lo sabré. A mi Bertín me cae bien y me reía mucho cuando presentaba ese mítico programa de “Contacto con tacto” hecho a su medida... “Machote ibérico” sí, pero tampoco tiene que ser algo tan despectivo… como él defiende.

Más adelante, he coincidido con él en pasillos televisivos y se intentó que viniera a Sálvame en mi época varias veces pero siempre prefería irse a Antena 3… Creo que llegué a preparar un informe o entrevista para Jorge, pero siempre se iba a DEC. Cuando yo me fui… por fin accedió a ir de invitado al Deluxe… y mira, me lo perdí. Está claro que lo nuestro era historia de amor imposible… jaja!

lunes, mayo 27, 2013

DE ADELGAZAR EN LONDRES (NI LA BUCHINGER ES TAN EFECTIVA…)


Cuando regresé a España un tiempo para que la Seguridad Social Española me arreglara mi hueso roto… decidí que según me quitaran la escayola “haría cosas” y “aprovecharía el tiempo”… tenía una convalecencia obligada de tres meses… así que debía de hacer lo que fuera para llenar mis días y no sentirme un parasito.

Bueno, el caso es, que “algo” hice… (Aparte de engordar, cebada por mí madre como si me fuera a sacrificar para hacer longanizas…) Me apunté a un curso gratuito para parados sobre guión documental, fui al cine, al teatro, me fui a Benicassim a la playa, fui al SOS en Murcia, a Alicante… Leí mucho, escribí mis mierdas, pensé demasiado…, eché de menos Londres, vi a mis amigos, trabajé de animadora en una fiesta, no quedó exposición en Madrid que no visitara… y me apunté a inglés por eso de no perderlo. Resulta que mi nivel del idioma es una auténtica mierda aquí y en España NO. Me sorprendió y me puse contenta. También me pareció muy triste… que pena de educación tenemos por Dios…
Mis clases de inglés eran divertidas. Como me sentía la lista de la clase hablaba mucho… y atendía poco. Un día la profesora que era de un pueblo cerca de Londres empezó a decir que en U.K. se engordaba… que la comida es muy “fat” y que se comía mal… No pude callarme… “Eso no es verdad. En Londres se adelgaza, porque simplemente no tienes dinero para comer” Todos rieron… Sí, sí, reíros… es verdad. Yo perdí 6 kilos el año pasado… dos tallas… me empezó a valer ropa de cuando estaba en la universidad… Durante unos meses comí una vez al día (a veces ni eso) y mi cena consistía básicamente en cerveza. La cebada y el trigo son cereales… yo creo que algo me alimentaban… y alimentan.

Quizá es mi culpa… soy tan social que prefiero gastarme el dinero en pintas con mis amigos que en un restaurante… (Y aquí va la súper excusa: además de resaca escribo mejor y soy más ingeniosa…haha) Por otro lado están las fiestas interminables londinenses que “misteriosamente” pueden quitarte las ganas de comer durante dos días… (Lalalalaaa) Y si eres una persona inquieta en Londres no paras, estás activo, mental y físicamente, quemando energía constantemente… siempre hay algo que hacer o que ver… como sabiamente dijo Samuel Johnson “Cuando un hombre se aburre en Londres, está aburrido de vivir, porque en Londres está todo lo que la vida puede ofrecer”.
Ahora sí, aquí,  “morirse de hambre”, puede llegar a ser literal… Como me dijo Mikel mi primer día en Londres “Come, Bea, come… que no sabes cuándo se va a volver a repetir…” y él lleva aquí 11 años… así que supongo que sabe de lo que habla.  El caso es, que yo tampoco he tenido hambre. A mí en Londres se me olvida comer. Tengo tantas cosas en la cabeza… ésta ciudad me agita tanto por dentro, tengo tanto que hacer y explorar… que comer es lo menos importante del día. No tengo tiempo. Es como los síntomas al principio de un enamoramiento… pierdes el apetito… estomago cerrado y demás… y desde luego yo estoy completamente pillada por esta ciudad. La amo, profundamente.

Para mi madre esto no tiene ni pies ni cabeza… y no lo entiende. A ella nunca le faltó comida en su pueblo a pesar de vivir final de guerra y postguerra. Aún así su obsesión por la comida es tal… que parece que hubiera estado encerrada en Auschwitz… y sufre, sufre en la distancia porque no sabe si su hija pequeña come y sobre todo, por no vigilar exactamente qué es lo que come… Por eso, cuando voy a verla, quiere que me alimente dándome cantidades ingentes de alimentos… y así tener reserva de grasa suficiente para resistir. La mujer me compra mil productos Made in Spain para que me los traiga. Yo lo agradezco… pero al principio de llegar a su casa, me pasa como en “Supervivientes” cuando los concursantes apenas comen y de repente, ganan una recompensa y se ponen a comer como bestias ansiosas… al final la ingesta te sienta fatal…
Para mí desde luego, Londres es mejor que la famosa clínica Buchinger… Llevo 20 días, sin darme ni cuenta y sin sufrimiento alguno… ya he perdido al menos 2 kilos. Vives en una eterna “operación bikini” algo paradójico teniendo en cuenta que lo de bañarte está complicado… el año pasado metí en la maleta mi bikini favorito y un pareo… ¡ilusa de mí! Ahí están en el armario esperando ver el sol…

Te sorprendes a ti mismo de cómo estiras el dinero cuando no lo tienes… Ya os he hablado de las famosas judías congeladas del Iceland  ¡¡por UN pound!!  Me duran tres días… y se han convertido en la base de mi alimentación. Aparte del producto español que me traigo siempre en mi maleta-despensa.
Pero que aquí se come mal, es un mito… a ver, quizá no se coma tan bien como en España ¡qué duda cabe…! pero no se come mal, de verdad. Tienes una variedad extrema…muy buenos restaurantes de todas partes del mundo y a todos los precios… y además auténticos… (Quiero decir, si vas a un chino, no esperes arroz tres delicias… ni tenedores…) Comprar alimentos  no es tan caro… si sabes buscar bien y comparar precios… hacerte la comida en casa ya te sale case igual que en Madrid… Lo cual me alucina. Además, cómo es una puta isla, encuentras de todo porque llegan productos de todas partes del mundo (menos las manzanas, las fresas… y los cerdos… que les sobran…). Eso sí, como curiosidad decir que a veces es más barato comer fuera que en tú casa… pero lógicamente, si tienes éste habito por norma… sí que engordaras como decía mi profesora de inglés… pero ni más ni menos que si sales a cenar o comer todos los días a restaurantes en España.

Luego está el tema transporte… sí, es caro… pero cuando he vuelto a Madrid también me ha parecido caro para los sueldos que allí se tienen. Aquí usas la bici… Medio de trasporte ecológico, barato y con el que encima haces deporte… ¡¡mejores piernas no he tenido en mi vida!! ¿Quién necesita pagar un gimnasio? Mi Lucy me lleva a todas partes y los coches nos respetan. Es verdad que me costó al principio, porque como la mayoría sabéis, soy disléxica. Y eso supone arriesgar tú vida y vivir al límite en una ciudad donde se circula al revés… La derecha y la izquierda… Puff un calvario para mí y la razón por la que mi madre cree que no voto al PP como hace toda mi familia… porque me confundo…
La falta de dinero en esta ciudad tan cara te hace despertar la mente, agudizar el ingenio, convertirte en un buscavidas, aprender a priorizar y sacrificar algunas cosas por otras… No tengo ni un duro…¡¡¡ pero ay!!! Cómo es mí amado Londres que sí quieres vivir aquí… mejor, corrijo: sobrevivir aquí, ¡¡¡él te lo permite...!!! Aunque no te asegura que vaya a ser fácil, como en una relación de pareja, igual.

Conclusión: Nunca he tenido menos dinero en mi vida y he sido más feliz al mismo tiempo. Aparte de tener una talla 38… con casi 35 años. ;D

Estoy que me salgo...!!